DISFONÍA INFANTIL

Un niño con disfonía (ronquera) frecuente o habitual debe ser controlado por padres y profesores . Es muy importante eliminar los hábitos vocales incorrectos que pueden dar lugar a lesiones de cuerdas vocales.

- Hablen con el niño  cada vez que tenga ocasión de cuánto molesta el ruido y lo agradable que es escuchar en silencio, respetando los turnos de palabra, y  hablando con voz tranquila, sin gritar.

- Identifiquen cuando hay esfuerzos vocales en la conducta del niño  y anote cuáles son ( carraspeos bruscos,  rabietas, gritos, llantos,  hablar sin parar, imitar ruidos, de animales, máquinas, personajes etc).

- Cada día adviertan al niño para que controle dichas conductas y procure no dañar su voz.

- Pueden registrar la frecuencia de estas conductas inapropiadas en un gráfico o simplemente anotarlo en una hoja poniendo cruces  cada vez que le oiga gritar o forzar la voz.

- Pacten con el niño: Refuércele con puntos o con pequeños premios si va disminuyendo el número de cruces diariamente o semanalmente.

- Refuércele también cuando hable tranquilo y sin gritar: Dígale lo bien que le entiende y lo agradable que es escucharle así.

LOS PADRES Y PROFESORES DEBEN SER EL MODELO QUE LOS NIÑOS IMITEN

- Hable despacio y vocalice bien, mire a la cara cuando habla y hágalo con tranquilidad. (si habla o grita cuando está enfadado o tenso lo más fácil es que dañe su voz)

- Evite estar con los niños en ambientes ruidosos que obligan a utilizar intensidades altas (música a gran volumen, megafonía...).

-Que beban agua frecuentemente y procuren respirar por la nariz cuando no están hablando.

TERAPIA MIOFUNCIONAL

¿QUÉ ES LA TERAPIA MIOFUNCIONAL?

Es el área de tratamiento de la LOGOPEDIA que sirve para prevenir, valorar, diagnosticar y corregir las disfunciones que pueden interferir, tanto en la producción del habla como en la deglución y en los distintos elementos implicados (respiración, musculatura orofacial, etc) desde el nacimiento hasta la vejez. 

Áreas de aplicación de la TMF 

o Patologías funcionales (dislalias, degluciones atípicas). 

o Malformaciones faciales, craneales y bucales (disglosias, maloclusiones). 

o Patologías neurológicas o neuromusculares (disfagia, disartria). 

o Secuelas quirúrgicas s de AVC o TCE. 

o Postintervenciones de la zona oral. 

o Cirugía tumores cara o cuello. 

o Cirugía plástica reconstructiva. 

o Roncopatías. 

o Pacientes geriátricos, enfermedades neurológicas o degenerativas, TCE, niños 

prematuros, etc.

Algunas de estas patologías funcionales son debidas a malos hábitos como usar el chupete frecuentemente más allá de los 2 años y medio o tres años, chuparse el dedo, respirar por la boca debido a vegetaciones, etc.

La rehabilitación más común ligada a la TERAPIA MIOFUNCIONAL suele ser la de la DEGLUCIÓN ATÍPICA, en la cual se realizan movimientos anómalos (atípicos) de labios, mandíbula y sobre todo de LENGUA a la hora de masticar y deglutir el alimento.

Aquí vemos un vídeo de la deglución correcta:

En la Deglución atípica, por el contrario, la lengua sobresale empujando a los dientes hacia afuera, por lo que produce descompensaciones a nivel orofacial, como mantener la boca abierta (normalmente son respiradores bucales), tener los dientes superiores salientes, mordida abierta y paladar ojival. A menudo tienen dislalias de los fonemas S, Z, RR, debido a la mala posición de la lengua en reposo y al deglutir.

Deglución atípica o incorrecta:

En la terapia miofuncional se trabaja con los movimientos del propio paciente y también mediante materiales de rehabilitación, como pueden ser depresores, gasas, guantes, gomitas ortodóncicas, pajitas, alimentos líquidos y sólidos, pantallas orales, obleas, etc.  Estos materiales nos ayudan a mejorar la postura, el movimiento correcto de los órganos orofaciales y la propiocepción estas estructuras.